Innovación es la palabra de moda en todas partes. Como cualquier moda, hay quienes se aproximan a la innovación de una manera absolutamente anecdótica, superficial y hasta desubicada. Creo que promover la cultura de la innovación es positivo. Sin embargo, también creo que en algún momento tenemos que dejar de hablar de Steve Jobs y pasar a los temas realmente importantes.
Es imposible promover un escenario para la innovación que pase por alto los temas transversales a cualquier negocio. Hay una serie de problemas crónicos propios del hacer empresa en Perú que hacemos de cuenta que no existen. Nuestro doing business es el elefante en medio del salón del discurso de la innovación. Si han ido en los últimos doce meses a SUNAT, Registros Públicos, Indecopi, el Ministerio de Trabajo o alguna Municipalidad saben de lo que hablo. No solo resulta largo y complejo hacer los trámites más simples sino que, a menudo, los procedimientos no marchan al ritmo al que marcha el mercado. Esto conviene a los abogados y consultores que pueden cobrar mayores comisiones por encargarse de esos trámites pero perjudica a los empresarios.
Un tema aparte es cuando llevas de paseo tu innovación por los bancos. Intenten pedir los requisitos para abrir una cuenta corriente a nombre de una persona jurídica y verán. Alguna vez hasta me pidieron cartas de recomendación de personas que conozcan a la empresa. Pero lo peor que te puede pasar es que tu innovación dependa de alguna manera del correo postal. Pocos lugares funcionan de manera tan torpe y anacrónica como Serpost. El año pasado estuvieron de huelga como un mes y eso afecto de forma tangible no solo a quienes comprar por Internet sino también a quienes venden, como páginas de comercio electrónico. Si le añades a la ecuación la intervención de Aduanas, hay material suficiente para escribir la segunda parte del El Proceso.
Este punto de vista superficial sobre la innovación también ha contaminado al Estado. Por ejemplo, vemos al Ministro de Comercio Exterior y Turismo apareciendo en todos los lugares que puede hablando de innovación y emprendimiento. Sin embargo, es su propio ministerio el que negocia de espaldas a la opinión pública el Acuerdo de Asociación Transpacífico o la nueva norma de responsabilidad de los proveedores de servicios por infracciones a los derechos de autor en Internet. Una pista: Si alguno tiene planeado emprender a través de Internet probablemente el resultado de ambos procesos afecte considerablemente tu proyección de gastos.
Este tipo de contradicciones alcanzan a muchas políticas públicas. Por ejemplo, ¿cómo se puede innovar en alimentos cuando están prohibidos los organismos genéticamente modificados? ¿Cómo vamos a crear una auténtica cultura de inversión privada en investigación si aplicamos ciegamente el impuesto a la renta a las personas jurídicas incluso cuando reinvierten sus utilidades? O pensemos en la última decisión de Indecopi de prohibir que se cobre por postergar pasajes aéreos. ¿Realmente creen que ese tipo de condiciones atrae más inversión? El sistema legal en sí mismo no está preparado ni pensado para promover la innovación. La lista de ejemplos es larga y de seguro todos conocemos uno.
Creo que bajar al terreno el discurso sobre la innovación ayudaría profundamente a todos. Hablemos menos de disrupción y pensemos más en las cosas que día a día desaniman a muchas personas a emprender. Hablemos del marco legal aplicable, donde iniciativas como el registro obligatorio de bases de datos personales necesariamente incrementarán los costos de cualquier emprendimiento digital. O hablemos de la obligatoriedad del aporte a un fondo de pensión para los trabajadores independientes menores de 40 años, que hará que cualquier trabajador freelance como un programador o un diseñador tenga menos dinero en el bolsillo todos los meses. Esos son problemas reales que están sobre el escritorio de muchos emprendedores peruanos. ¿Qué ha hecho nuestro daydreaming sobre la innovación para solucionarlos?
Muy cierto todo lo que expones, seria interesante que pudieras hacer un listado con todos los puntos legales que son una traba para innovación en el Perú y lo compartas en un excel en google doc público, invitando a otros usuarios a conocer y agregar otros puntos que ellos conozcan, con todos esos puntos mapeados y de conocimiento público ayudaría a que la gente reaccione ante esta problemática.
salu2
Falta dar un listado de factores, ¿Cierto? He aquí el mío
– La SUNAT y el absurdo IGV a las importaciones (que hasta arruina lo poquito que tenemos de beneficio de los TLC). Por esto ya existe una demanda de Guatemala ante la OMC, por cierto.
– El MTC (muy aparte de la repartija del 4G), quien no cree en estándares internacionales como la norma 802.11 (aka Wi-Fi) y obliga a tramitar permisos de internamiento a todo equipo que lleve una antena y deba entrar al perú. De esto se presta Aduanas en varias ocasiones para picarle al potencial importador o usuario común.
– Las zancadillas a la red que ponen los ISP con medidas criminales (Traffic Shaping, bloqueos arbitrarios, monitoreo de datos, etc.). La ley Chehade también puede apuntar a favorecer esas medidas, al dar una excusa a lo que actualmente vienen haciendo los ISP en el perú contra los usuarios de manera ILEGAL.